La vacuna contra el Covid-19 es una imposición de los países poderosos a las naciones que tienen una débil economía, afirmó el científico e investigador chileno, Luciano Pardo.
Desde octubre del año pasado, cuando iniciaba en México la estrategia nacional de vacunación, el también mensajero de los extraterrestres que habitan en el sector Pléyades de la Constelación de Tauro, fijó su postura:
“Ningún gobierno del mundo puede aplicar la vacuna contra el Covid-19 si el ciudadano no lo desea, pues ésta debe ser una decisión personal y voluntaria”.
Dijo que si se obliga a personas de cualquier país como México, a aplicarse la vacuna, ellas pueden recurrir a tribunales internacionales para que los gobiernos de sus países respeten ese derecho a elegir.
“Nadie, bajo ninguna orden puede obligarte a introducirte en tu cuerpo un elemento que te parezca notoriamente peligroso; hay leyes internacionales como la de las Naciones Unidas; existen otros tratados como el Tratado de Helsinki y el Tratado de Roma en el año 2005”.
Durante la extensa charla en la que el tema central fue la aplicación de la vacuna contra Coronavirus, Luciano Pardo reiteró que la mayoría de los países tienen una débil economía y problemas financieros, por lo mismo están sometidos a poderosos organismos financieros que condicionan su apoyo económico a cambio de implementar las políticas que les dictan esos gobiernos, como en este caso, la aplicación de dicha vacuna.
Por tal razón, los líderes de esas naciones se han negado a emplear el clorito de sodio para atacar el Coronavirus porque no les conviene, sostuvo, ya que esa sustancia contiene un potente efecto desinfectante que destruye todas las bacterias y patógenos, protege las células y refuerza el sistema inmunitario.
Luciano Pardo, quien afirma haber sido contactado por los seres pleyadianos más de 36 veces desde el año 1965, asegura que aún tiene contacto con esos seres espaciales y que incluso, muchos habitan en la Tierra, en grandes naves diseñadas como ciudades, en lugares subterráneos o submarinos.
