Como una forma de nutrir las zonas forestadas y reforestadas, el Gobierno de Río Bravo y la oficina local de la Comisión Nacional Forestal (Conafor) que encabeza Santos Salgado Jacobo, sostuvieron reunión con ecologistas y autoridades municipales con el fin de buscar una forma de dar viabilidad a las labores de forestación y reforestación.
El funcionario federal dijo a los ecologistas, entre ellos Jorge Arturo Navarro Mireles y personal de Desarrollo Rural del municipio, que la Conafor da seguimiento a arbolitos entregados a particulares, instituciones y asociaciones civiles.
Santos Salgado dijo que cuentan con la capacidad de 200 mil árboles, lo que amerita mucho abono para hacer viables a cada uno de estos ejemplares sembrados.
Jorge Arturo Navarro ecologista reconocido, dijo que lo que más cuesta es el mantenimiento de la forestación y reforestación y si no se integra a la sociedad, de nada sirve.
«Los vecinos no los riegan, los tiran cuando los reciben en donación.El árbol no solo genera oxígeno, sino que atrapa el dióxido de carbono y lo transforma en nutrientes para el ecosistema», precisó el protector del medioambiente.
Navarro dijo que les ha resultado mejor trabajar con las escuelas, así como el canje de árboles por plásticos también ha dado resultado, pero «falta lugar de acopio para los plásticos», por lo que tiene confianza plena en las autoridades locales y federales.
Logran solución para abonar zonas arboladas, forestadas y reforestadas
Se acordó que se recabarán los desechos de los rastros y el café utilizado en las tiendas de conveniencia, el cual se mezclará con acerrín, ceniza, agua, que se aplicarán para el desarrollo de las plantas, mediante la elaboración de abono o fertilizante.
La mezcla se realiza con hojas, materia fecal del Rastro municipal y agua para composta, la cual ya tuvo sus primeras aplicaciones de acuerdo a Desarrollo Rural del municipio.
También fruta y vegetales en descomposición, se utilizarán para realizar composta en instalaciones de Conafor a través de convenio con el municipio, con el fin de nutrir las poblaciones de árboles.